La Vicaría de Pastoral Social fue creada el 18 de agosto de 1992 en honor a su patrono, san Alberto Hurtado y depende directamente del Arzobispado de Santiago. Sus orígenes se remontan a la Vicaría de la Solidaridad, de quien es heredera y continuadora de su labor de defensa a la vida y de los derechos humanos, especialmente de personas y grupos en situación de vulnerabilidad y pobreza en la sociedad chilena: como niños trabajadores, jóvenes de sectores populares, los presos, adultos mayores, migrantes y refugiados.
Desde el año 2006 la Vicaría de Pastoral Social y la Vicaría de los Trabajadores se unifican y desarrollan una labor conjunta como, su tarea está inspirada en la Doctrina Social de la Iglesia, en la promoción de la dignidad del ser humano y el respeto de sus derechos.