Luis Omar Lara Mendoza nace en Nohualhue, cerca de Nueva Imperial el 9 de junio de 1941, pero se cría y su infancia en la cercana Nueva Imperial, es un poeta, traductor y editor chileno, que empezó a escribir en la enseñanza básica y luego en el liceo.
En 1963 ingresó a Pedagogía en Castellano en la Universidad Austral, en Valdivia. Ese mismo año se casó y al siguiente fundó el grupo y la revista de poesía Trilce (que primero se llamaba Hojas de Poesía Trilce), de la cual sigue siendo director.
Siendo estudiante, en 1965 comenzó a trabajar en la Biblioteca Central de su alma mater; dos años después abandona Pedagogía, sin llegar a titularse, pero continúa en su cargo de bibliotecario hasta 1969, cuando pasa a dirigir la Oficina de Publicaciones y Difusión de la universidad. Dirigirá también la revista y los cuadernos Surarte de la Facultad de Bellas Artes. En 1971 obtiene el que será su último trabajo antes del exilio en la Universidad Austral, en el departamento de Extensión Cultural.
Después del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, Omar Lara fue detenido y permaneció 4 meses encarcelado.
Luego se exilió, primero en Lima, Perú —adonde llegó en enero de 1974—, y después se asentó por casi una década en Rumania, donde se graduó en Filología en la Universidad de Bucarest y allí, además de a estudiar, se dedicó principalmente a la traducción.
Lara en Chile, al momento de dejarlo, era ya un poeta con un sólido nombre, con tres libros publicados —Argumento del día (1964), Los enemigos (1967) y Los buenos días (1972) —, con varios premios a su haber y con el aura que le daba su calidad de fundador y director de Trilce.
En 1981 abandonó Bucarest y se instaló en Madrid, donde refundó Trilce, que tuvo una existencia efímera. Dio también inicio a Ediciones LAR (Literatura Americana Reunida) y a la revista del mismo nombre, que a diferencia de Trilce, que era de poesía, pretendía ser más amplia, de literatura, testimonio y ensayo. En la capital española pasó a formar parte del comité de redacción de la revista chilena en el exilio Araucaria.
Miembro de la llamada generación dispersa o de la diáspora, en sus años de destierro nunca dejó de escribir ni de publicar —en Perú, Cuba, Rumania, España— y al reconocimiento nacional que tenía se le agregó el internacional nada más salir de su patria gracias al Premio Casa de las Américas 1975.
De regreso en Chile, comenzó en Concepción la tercera etapa de Trilce y estableció la librería y editorial Alas (calle Ongolmo 139), donde ha continuado también con Ediciones LAR. Desde 2006 es asimismo profesor adjunto de su alma mater, en Valdivia.